miércoles, 4 de marzo de 2020

Coronavirús en Clave Decamerón


En clave Decamerón, con el coronavirús se recuerda la peste bubónica que hizo, cosa rara, que Giovanni Boccaccio empezara su delicioso libro erótico con un aislamiento por la peste; texto luego censurado por la hipocresía.


 A veinte años del siglo XXI, y con la experiencia del sida que reprimió en buena parte la conquista fácil, los casanovas tiemblan ante esta nueva peste, pero dio cuatro letras del cuerpo para que un moderno sátiro creyera en un brote de aislamiento que haría más difícil su tarea de hacer del placer un deporte; al menos para él. A pesar de su edad y recordando cuando no levantaba una mano y ya tenía una amante, andando el siglo XXI le costaba trabajo meter a la cama una conquista y sentenciaba el nuevo triunfo del puritanismo: sólo prostitutas para los maridos castos y culiprontos. 
Hace rato ladraba de ganas,alérgico a las damas de vida alegre, pero su debilidad es pecuniaria; un casanova pobre, nada de restaurantes o discotecas; cerveza o empanada para su nueva discípula.
Así las cosas puso en práctica su regla cuatro del cuerpo: impresionar. Ya a la hora de le verdad se dijo que no es que fuera machista , cuando vio a una hermosa dama conquistada al momento de la verdad; tenía pájaro.