viernes, 20 de mayo de 2022

Las angustias del Marqués de Vargas Llosa

 Mario Vargas llosa, premio Nobel de literatura y destacado pensador político, que hasta las altas jerarquías de China, le conceden seriedad, se quedó en una cosmovisión política que parece no haber tomado las experiencias de la Historia, menos de la Europea.


Lector voraz del inglés de la Sociedad abierta y sus enemigos, Popper se cerró en sus postulados, que cierran el diálogo con otros pensadores, y ahistóricamente da las bases para fundar una praxis sociopolítica, la que traducida a latinoamericana ha forjado precísamente, la otra cara de la moneda: el avance de populismos de todo tipo, por la permanencia de políticos que se han ido acomodando a una extrema derecha de corte continental.

Vargas Llosa omitió la lectura de Marcuse, especialmente «La lucha contra el liberalismo en la concepción totalitaria del Estado», y en el continente la recepción de pensadores se da por precio de moda y mercado, sin una recepción crítica desde la historia, que viéndolo realmente,de ser posible, es como poner a leer a Hegel, a un curso de quinto primaria en una zona rural de Colombia: con profesores con el coco neotomista.

Vargas Llosa, crítico de los populismos, no le interesa el avance de una democracia, en qué cuente también, precísamente lo que mArcuse denunció ¿en qué medida el liberalismo moderno, sienta los presupuestos del avance del fascismo?


miércoles, 11 de mayo de 2022

Guerra intestina y anomia creada

La anomia contiene violencia latente y a diferencia de los que la crearon y aprovecharon para medrar y creen que se encubren y hasta remedian con la simulación, ésta precisamente agudiza la violencia latente.

A la tesis que sostuvieron que la violencia es un movimiento reivindicatorio de la tierra objeta el "humanista liberal" que eso no es cierto porque "esa fue una violencia esencialmente política, ‘dirigida a un sólo fin: reducir las mayorías liberales del país

es decir el análisis de sociología electoral de la relación entre abstención electoral y oligarquía y caciquismo, una investigación histórico-social y sociológica del fraude. La satisfacción de ese desiderátum mostrará los mecanismos que entrelazan la "solemne afirmación del orden jurídico" y "constante y sistemática violación de sus principios", pero entre tanto cabe enunciar la hipótesis de que las discrepancias entre realidades reprimidas


Por hoy, ante la descomposición de la República bajo el patrocinio de uno de los más recientes delfines de la nueva Colonia monárquica, el país se ve enfrentado a la tarea de descifrar una frase con la que José María Samper caracterizó el estatismo del poder ejecutivo del triunvirato parroquial. Su argumento "sólido y concluyente" para no cambiar lo dice "el gamonal, con aquella lógica pastrana y positivista que a su posición conviene"41. El primer adjetivo significa "burdo y mal hecho" y hoy no se usa. ¿Tuvo José María Samper un don profético lexicográfico para que los diccionarios actuales vuelvan a registrarlo con algún sentido más? Esta sería una hipótesis más de las que han suscitado un par de textos literarios. 




Tergiversar y eufeminizar, las dos caras de la moneda, la constitución de la versión colombiana de la anomia y la cultura de la intimidación en el desajuste del sistema de normas y valores de la convivencia; destructores de la cultura y el conocimiento y ensalzadores de la viñeta y el folclor como alta cultura,  autoexiliados en sus inmensas haciendas





Carlos García Prada ilustra ingenua e involuntariamente el sentimiento patriótico de esa clase, encarnado para él en los antepasados y padres de José Asunción Silva: Silvas, Ferreiras, Fortouls, Sánchez... Gómez, Diagos, Ureñas, Ángulos, descendientes unos de rancias familias nobles de Navarra y de Aragón y otros de ilustres familias de Andalucía... las dos estirpes (de los padres del poeta R. G. G.) fundían en uno muchos impulsos contradictorios... alejadas de Europa, trasplantadas, desarraigadas, las dos familias que representaba el matrimonio Silva-Gómez hicieron su hogar en Bogotá, y ese hogar era un refugio contra la barbarie que las rodeaba. Un refugio de soledad y añoranza, en cuyo seno se agitaba silencioso ese inefable y dramático complejo del retomo que caracteriza a tantas familias iberoamericanas de claro y antiguo abolengo39. Aunque la ilustración de ese patriotismo de nostalgia por el extranjero parezca exagerada y sea inmarcesiblemente cursi, lo cierto es que en el fondo es tan cierta como el restacuerismo de sus ejemplares. Pero este florido exilio que considera al mundo circundante colombiano como barbarie no sólo denota un fracaso tácito de la empresa de los "descendientes de Don Pelayo" sino en un desprecio que supone la degradación enemiga de la población colombiana. Sus normas y valores no concordaban con las de sus "siervos bárbaros". Estas múltiples y hondas discrepancias de la República colonial o de la República monárquica no desaparecieron en el siglo XX, sino adquirieron un carácter de soñolienta legalidad, que tras el paréntesis del gobierno deAlfonso López Pumarejo, inició un período de "calma chicha" con el gobierno de Eduardo Santos y de preparación sinuosa y regresiva del primer estallido de violencia colectiva y social en 1948. El asesinato de Jorge Eliécer Gaitán provocó una reacción de apariencia primordialmente política. No fueron políticas, empero, las manifestaciones concretas de esa reacción: el saqueo de los almacenes lujosos de Bogotá, especialmente en la carrera 7a entre calles 12 y 22, en la región en que se concentraba y exhibía el poder de las clases altas. Tras la reacción política se ocultó la reacción de un largo resentimiento social. La diferencia entre la violencia de las guerras civiles del siglo XIX y la del 9 de abril del 48 sólo corrobora la violencia latente en un país de creciente "anomia", dirigida y fomentada por la prensa política (El Tiempo y El Siglo) y el dogma eclesiástico en beneficio de sus intereses del país.



"40. La explicación del sociólogo es sorprendente no sólo porque revela la insignificancia que el historiador e historiador social liberal da a la historia y a la historia social, sino porque llama "realidad electoral" a un fenómeno que requiere la clarificación del modo como se llegó a la "realidad electoral" que postula apodíctica mente el clásico del humanismo colombiano, 

y construcciones ficticias dominantes, entre rostro de orden político republicano y praxis social y política colonial o monárquica, entre pretensión de civilismo y estratificación social de sociedad sutilmente "esclavista", entre boato cultural vacío y cultura real precaria, forman una red de indignantes provocaciones en cuyas mallas se anida la disposición de violencia. 

 La República colonial o monárquica se ha apoyado en "cuadros de resistencias" que han sido sustituidos por serviles dependencias del extranjero, sin que sus beneficiarios moderen para ello su cursilería doméstica. Degradada así a "republiqueta" norte americanizada o teutonizada con duros condimentos neoliberales, su llamada "clase dirigente" ha preferido para sacarla de la red seguir el ejemplo de Sansón y arriesgar pertinazmente que de la "muerte de Sansón con todos los filisteos" ella resucite como un fénix, pero en otro lugar del planeta, donde se calme "ese inefable y dramático complejo del retorno". 



viernes, 6 de mayo de 2022

¿Hacia una exploración, valga la paradoja, de los «territorios propios», y la observación de la «glocalidad»?

Qué es ¿Hacia una exploración, valga la paradoja, de los «territorios propios», y la observación de la «glocalidad»? Es recordar,  interpretar desde  la «escritura», desde la atmósfera de la historia mundial y lo multicultural. La polémica incide en la divulgación de obras, en el cambio de paradigmas que se está señalando. Glocalidad es un concepto que parte de la economía,  luego pasa a las humanidades; lo definimos en el « pensar territorialidades… como un mapa de la subjetividad en tanto proceso de demarcación de zonas de sentido y de inscripción de modos de habitar el mundo… Dónde se ponen en juego las creencias, los valores, los consensos; lo individual y lo colectivo» (1);  así ponemos el objetivo de búsqueda en los textos de los tallerandos.  Las borrosas fronteras entre lo urbano y lo rural,  el conflicto interno, que  fomenta desplazamientos, fenómenos de  migración internacional, creación de opinión por los medios de comunicación; causas que alimentan la glocalidad, no solamente  del escritor ¿Pero que hace que dada escritura sea aceptada internacionalmente? Una obra, no necesariamente muestra una territorialidad física: « …Se produce en una relación de contigüidad creativa entre los imaginarios territoriales.. Y las experiencias de territorialización /subjetivación a las que abre el proceso de producción de un texto-obra» (Id). Pedro Henriquez  Ureña, modela un contorno desde la glocalidad en 1928 (2); lo nuevo reside en la creación del concepto: globalidad y localidad integrados; el escritor suma su acento.  Saltando la  polémica, aparecía en  la Revista Granta (2021) una selección de latinoamericanos menores de 35 años (3). Valerie Miles polemiza desde  la globalización;  el uso de los  «big data», por las editoriales, creando modas, averiguando el gusto público para manejar el mercado. Se valen, ya de un tópico, llevado al usado en inicio en obras universales como en  «Guerra y paz»: «El estudio de la naturaleza humana.. Creando productos que no solo se adapten a esto sino que continúen homogeneizando los gustos… Personajes carismáticos, escenarios exóticos, sucesos amarillistas, apelación constante a las emociones… Crimen, sexo, manipulaciones, etc» (Id). «La epidemia colombiana por la sicariez» sigue su curso a pesar de una gran modelo como «cóndores no entierran todos los días»(1984), hecho que  ha cambiado. Miles, cree en los autores desde sus propias tradiciones; de su propia prospección (¿exploración de «territorios propios»?) en el hilo de ariadna de su inconsciente colectivo; hacia una superación de lo testimonial, del yo excesivo. En la selección, está el colombiano José Ardila (4), que escribe desde su subjetividad, en Chigorodó (Antioquia), donde confluye una amalgama de tradiciones «mezcla de pieles y de acentos también, de culturas diferentes, de formas distintas de hablar y de percibir el mundo»(id). Granta, trasciende la polémica y da «caza» a esas voces, y en su  búsqueda de  variopintos acentos y aptitudes. Así mismo, le apuesta a la promoción de talleres desde la periferia ¿Pero cada autor lleva en si mismo su periferia, su «inconsciente colectivo»? Indiferentes a las polémicas de envergadura, se encaminan a una validez desde la crítica mundial, los jóvenes  seleccionados, desde sus propias tradiciones» y territorios… ¿Este fenómeno indica un volver a arar desde los campos que hicieron el boom latinoamericano? El reto está, como dice Miles, en el manejo de una impecable técnica ( Selección 2020), como la exploración desde sus propios territorios y tradiciones (selección 2021)

Artículos citados: Constelaciones territoriales en la literatura y el arte contemporáneos de América Latina (2017. En línea). Seis ensayos en busca de nuestra expresión(1928. Revista Cielo Naranja, en línea). Originalidad, actitud y humor: qué buscó 'Granta' en los mejores narradores jóvenes (2021. En línea). José Ardila, el colombiano en “Los mejores narradores jóvenes en español 2” de la revista GRANTA (2021, en línea)