El
legado de Vargas Llosa
El dinámico legado que nos deja Marío Vargas Llosa está en una
insobornable “libertad de expresión” que deja novelas como “El sueño del
Celta” que delata el colonialismo psicópata del Congo y del Amazonas
por el caucho, la Fiesta del Chivo y Tiempos recios entre otras, que
delata el intervencionismo de los Estados Unidos en los llamados golpes
de Estado en América latina. Y “esa libertad de expresión” como decía un
periodista, se traduce en la coloquial Frase: “Vargas llosa no calla
nada; dice lo que piensa”. Pero ese decir lo que piensa, no viene de la
espontánea tradición del “romanticismo”, viene de su reacción; como
Borges (del que era lector incansable), el “Modernismo” nos dio la
libertad que necesitábamos; nos dio el “cosmopolitismo” que nos saca de
una visión estrecha de la realidad. Vargas Llosa nos deja también un
irrenunciable latinoamericanismo. Pero sobre todo me deja “la libertad”
como faro en mis senderos de lector.
Mario Vargas llosa, premio Nobel de literatura y destacado pensador político, que hasta las altas jerarquías de China, le conceden seriedad, se quedó en una cosmovisión política que parece no haber tomado las experiencias de la Historia, menos de la Europea. Lector voraz del inglés de la Sociedad abierta y sus enemigos, Popper se cerró en sus postulados, que cierran el diálogo con otros pensadores, y ahistóricamente da las bases para fundar una praxis sociopolítica, la que traducida a latinoamericana ha forjado precisamente, la otra cara de la moneda: el avance de populismos de todo tipo, por la permanencia de políticos que se han ido acomodando a una extrema derecha de corte continental.
Vargas Llosa omitió la lectura de Marcuse, especialmente «La lucha contra el liberalismo en la concepción totalitaria del Estado», y en el continente la recepción de pensadores se da por precio de moda y mercado, sin una recepción crítica desde la historia, que viéndolo realmente,de ser posible, es como poner a leer a Hegel, a un curso de quinto primaria en una zona rural de Colombia: con profesores con el coco neotomista.
Vargas Llosa, crítico de los populismos, no le interesa el avance de una democracia, en qué cuente también, precisamente lo que Marcuse denunció ¿en qué medida el liberalismo moderno, sienta los presupuestos del avance del fascismo?